Todos los niños sienten miedo en ciertas situaciones. Es un fenómeno natural que acompaña las etapas de crecimiento y socialización. Un adecuado apoyo del entorno familiar hará que aprendan a dominar sin problemas estos sentimientos. Sin embargo, las condiciones actuales de vida exponen a los adultos a tantas situaciones de estrés, tensión y ansiedad que no les resulta fácil mantener una actitud segura y serena.
Cuando el grado de ansiedad de un niño resulta preocupante, hay que buscar la causa muchas veces en las angustias de los padres. La frecuente tendencia a la sobreprotección puede suscitar en el niño un estado de angustia patológica que puede provocar hiperactividad, falta de concentración y fracaso escolar.
Después de un breve repaso de las teorías científicas sobre la ansiedad y la angustia, los autores muestran en muchos casos clínicos y de la vida cotidiana cómo entender los estados de ansiedad y cómo controlar y superar sus manifestaciones patológicas.
Esta obra será de gran utilidad para padres, educadores y psicólogos.