Cuando el alma está en sordina, el cuerpo grita. El miedo, la angustia y el estrés de la vida moderna generan jaquecas, dispepsias, trastornos respiratorios, insomnio y fatigas. La medicina psicosomática se propone reintegrar el síntoma del paciente al contexto de su ambiente, sus condiciones socio-culturales, sus conflictos conyugales, su relación con padres o hijos y sus preocupaciones profesionales.
En este libro, Gilbert Tordjman explica qué relaciones existen entre los trastornos psíquico-afectivos y la obesidad, la anorexia mental, las úlceras, la colitis, los problemas cutáneos o el asma y cómo pueden tratarse estos síntomas. Con prácticas sencillas es posible contribuir a la recuperación del equilibrio de las sensaciones y de la armonía con el mundo.